Panoramas isleños
Oda al paisaje puertorriqueño
En gran medida, el ser humano es producto del entorno que le rodea; por tal razón, la identidad del puertorriqueño siempre ha estado estrechamente ligada a la majestuosidad del paisaje isleño. Este ha sido protagonista de la historia nacional, sobre todo, de la historia individual de cada ser que ha residido en la Isla. Esa comunión del ser humano con su tierra se evoca en las imágenes que conforman la exposición fotográfica Panoramas isleños: Oda al paisaje puertorriqueño que presenta el reconocido publicista y profesor en la Universidad de Puerto Rico en Carolina, Jorge Delgado Maldonado. Esta muestra inaugura el Corredor de las Artes, un nuevo espacio de exposiciones dedicado exclusivamente a la producción artística de la comunidad del Recinto.
Las memorias de su niñez son el hilo conector de esta serie de imágenes que evidencian la grandeza de un paisaje que, al pasar de los años, ha sobrevivido la transformación desmedida de la civilización. Imágenes repletas de nostalgia hacia un pasado familiar, a los paseos junto a su padre por la costa norte de la isla, de Río Piedras a Luquillo, donde residían sus abuelos. Imágenes que hacen un llamado a descubrir quiénes somos, a través de la naturaleza que nos rodea, de conocer su historia, que nos obligan a hacer pausa y observar el paisaje de nuestras vidas, que muchas veces ignoramos mientras vagamos hundidos en el ajetreo de la rutina diaria.
Delgado Maldonado aprendió a valorar el arte de la fotografía desde muy niño. Fue a través de su padre y su tío, quienes la practicaban y utilizaban un laboratorio fotográfico improvisado en la cocina de su residencia, que conoció el medio por primera vez. Al ver cómo estos revelaban las imágenes, el artista reconoció desde muy temprano la versatilidad y el poder de la imagen fotográfica. Su obra, enriquecida por su amplio conocimiento sobre el arte y la historia de la fotografía, encuentra referente en la producción artística de los maestros de la fotografía del siglo 20, en particular, Ansel Adams y Edward Weston. Los paisajes fotográficos de estos, que presentan la naturaleza del oeste norteamericano en constante transición y en los cuales la luz es el elemento principal, encuentran eco en Panoramas isleños.
Desde el advenimiento de la fotografía digital, Delgado Maldonado ha explorado continuamente las posibilidades ofrecidas por los constantes avances tecnológicos que facilitan el manejo de las imágenes fotográficas. Panoramas isleños es el resultado de esta insaciable curiosidad que le motivó a explorar en particular la técnica del fotomontaje, creada a mediados del siglo 19 por el fotógrafo sueco Oscar Gustave Rejlander, aprovechando las posibilidades infinitas de la cámara digital. Las fotografías de esta exposición son el resultado de la fusión de series de instantáneas en imágenes panorámicas, y evidencian un excelente dominio de la técnica digital, logrando unir impecablemente varias de estas que fueron originalmente captadas por una sola cámara en movimiento.
Panoramas isleños: Oda al paisaje puertorriqueño muestra un paisaje en donde la naturaleza es protagonista; una naturaleza poderosa que supera todo rastro de civilización y que en ocasiones evoca el paisaje de la Isla antes de la conquista. Las fotografías incluyen vistas desde la torre de observación Yokahú en el Bosque Nacional del Yunque, a 1,575 pies sobre el nivel del mar, escenas pastoriles en la llanura al noreste de la Isla y escenas playeras, donde la huella de la civilización no ha dejado marca. Cuando un paisaje urbano es visible, este se comprime bajo un cielo monumental. La naturaleza es más poderosa que la ciudad, símbolo puro del desarrollo desmedido experimentado en la Isla durante la segunda mitad del siglo 20. Con una perspectiva romántica, Delgado Maldonado busca compartir una ventana imaginaria que produzca sinapsis visual de bienestar y salud, recuperando así el paisaje del pasado para motivar la preservación del paisaje del presente para el futuro.